Entrando al Río Sarmiento desde el Capitán.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Otoño del Espera.


Muerdago en pleno invierno.


El remo Argentino crece.

lunes, 24 de octubre de 2011


TIGRE.- Cualquier persona puede remar. Joven, niño, adulto, anciano, con exceso de peso o delgado. No hace falta ser un atleta. Con esta premisa, la Dirección de Turismo de Tigre lanzó el programa Primera Clase de Remo Gratis, desde la Escuela Municipal de Remo, en el Nahuel Rowing Club durante octubre y noviembre.
"Antes, este deporte estaba relegado a los grandes clubes y tenía fama de caro: ya no. Queremos que se acerque cada vez más gente, como pasó con el maratonismo", dice Julia Garisoain, a cargo de esta iniciativa municipal y socia-instructora de Puro Remo.
Hay trece clubes de remo en Tigre, aunque sólo uno está abierto al público general. Es el Nahuel Rowing Club. Desde allí, y algunas escuelas de remo promocionadas por el municipio, la actividad se abre cada vez más, ganando jerarquía.
El remo logra día a día nuevos adeptos como actividad turística; deportiva a nivel inicial o superior; corporativa para empresas; en travesía para personas en buen estado físico; en competencia o como terapia curativa.
Se trata de uno de los deportes más completos que utiliza todos los músculos: cada persona lo hace con la intensidad que puede; el exceso de kilos o la discapacidad no representan un impedimento para su práctica. En el agua somos iguales.
Lindero con la Pista Nacional de Remo, el Camino de los Remeros conecta el acceso a Tigre con Nordelta y Villa La Ñata. Cuenta con miradores, bicisendas, cámaras de seguridad y dársenas para los autos, inaugurado en junio de este año, etapa que culminará en noviembre con la apertura del galpón para guardar botes y los vestuarios. Gracias a esto, Tigre será la sede de la competencia para la obtención de las cuatro plazas para los Juegos Olímpicos, el 22 de marzo próximo.

EN EL AGUA

"Poné la espalda derecha y remá con todo el cuerpo. No, no; mirá hacia arriba, mirá dónde estás, disfrutá de la naturaleza", indica Julia a los novatos. El movimiento es cíclico: si se hace mal desde lo postural, alguien va a llorar al día siguiente. En promedio se pueden realizar 20 remadas por minuto, 120 por hora.
Aunque es posible remar a la que te criaste, la actividad requiere de un aprendizaje para manejarse en forma segura en el río y conocer las reglas de la navegación.
Resulta esperanzador que a una hora de Buenos Aires esta práctica, antes relegada a unos pocos, se pueda transformar en un camino hacia la recreación de todos en el contacto con la naturaleza y el ejercicio físico.
El bote se desliza lentamente sobre el agua. Internarse en riachos donde los juncos dificultan la navegación o en las cercanas lagunas, con la algarabía de los pájaros y las flores en primavera, es motivo de alegría genuina de los incipientes remeros.
En la primera clase se explican los conocimientos rudimentarios para remar: un tiempo después, el interesado puede obtener su carnet. Con cuatro clases una persona está en condiciones de manejarse en forma segura en el río.
Los botes de madera mantienen la elegancia de antaño, pero también se puede remar en kayak, canoas canadienses, gomones...

REMOTERAPIA

Desde la empresa Mutare coordinan salidas de remoterapia con Puro Remo, que concluyen en su sede del continente: allí reciben a los pasajeros con masajes californianos, música y un refrigerio saludable de la mano de la cocinera Daksha. Los interesados pueden dormir en el hotel Villa Julia sobre el Paseo Victorica, con desayuno y late-check out.
En Bonanza Deltaventura se coordinan paseos de una a cuatro horas por los ríos y las lagunas cercanas. Allí se visualizan pájaros, plantas y se cuenta la historia de Tigre. Las cuatro canoas canadienses poseen remos simples que no requieren aprendizaje alguno.
Bonanza también ofrece día de aventuras en el Delta que incluye dos de las cuatro actividades -remo en travesía, bicis, cabalgatas o trekking- y la parrilla del mediodía.
Por su parte, la Escuela de Remo Adaptado de Sebastián y Karina Tula imparte clases de remo para personas con capacidades diferentes en forma gratuita. Disfunciones motoras, problemas físicos y síndrome de Down son algunos cuadros que presentan los 15 alumnos que reman una o dos veces por semana en botes un poco más anchos con flotadores y sillas, muy seguros.
"Mi hijo Carlitos recibió infinidad de tratamientos gratuitos. Es un niño adoptado con problemas congénitos por el abuso de drogas por parte de su madre antes de nacer; siempre se sintió feliz en el agua. Entonces quise devolverle a la sociedad el gasto y la energía que hicieron posible que hoy mi hijo esté bien dentro de sus posibilidades. Antes de pedir, primero hay que dar", reflexiona Sebastián.
Karina cuenta que chicos y grandes no paran de disfrutar y enseñarle en cada salida de una a dos horas: su entusiasmo es superior. "Una vez llevé a una persona en silla de ruedas hasta el bote. Al final no quería bajarse."
Finalmente, Un lugar en el Arroyo organiza salidas para empresas. Los grupos toman clases de remo y kayak de 60 a 120 minutos acompañados por un profesor o un guía, con lancha de apoyo, ambulancia y guardavidas. Luego se relajan en la isla: comen una exquisita parrilla o platos cocinados en el horno de barro, disfrutan del río, descansan en una hamaca paraguaya o recorren el sendero al interior.
Cuentan por aquí que el turismo ligado al coaching corporativo elige cada vez más el Delta como base para sus acciones. "El remo es una dinámica perfecta para el team building. Hay una analogía entre el equipo de trabajo y la tripulación de un bote de remo, además del contacto con la naturaleza que mejora el ánimo", cuenta Julia.
Se puede remar desde los 8 años hasta que el cuerpo resista, incluidas las personas con capacidades especiales desde los 15. Resulta el deporte ideal tanto para iniciarse en la actividad física como para complementar el entrenamiento de otros deportes o para hacer de éste un estilo de vida sano y en contacto con la naturaleza. Por eso, ¡a seguir remando con entusiasmo y alegría! Que de eso se trata la vida.
ASOCIARSE A UN CLUB
Son trece los clubes del casco céntrico de Tigre, más uno mudado en forma reciente a Villa La Ñata, el Teutonia. Para asociarse se requiere de la presentación de otro socio que brinde su aval, salvo en el caso de Nahuel Rowing Club.
Los precios varían según las prestaciones y el perfil del club, entre 180 y 300 pesos mensuales para un adulto. Se ofrecen aranceles diferenciales de acuerdo con la edad del solicitante, así como cuotas familiares. Al asociarse se firma un convenio por un año, es decir, se deben seguir abonando las cuotas durante 12 meses para poder solicitar la baja.
EL REMO EN EL PAÍS
En 1870, un grupo de jóvenes ingleses realizó el primer recorrido en botes de remo entre Buenos Aires y Tigre. Lo hizo en 3 horas. Al año siguiente se organizó una regata amistosa en el río Luján, considerando esta vía fluvial como una de las más aptas para esta práctica.
La primera regata oficial, según publica la Asociación Argentina de Remeros Aficionados enwww.remoargentina.org.ar, se realizó el 10 de diciembre de 1873. Desde la Estación Central se despachó un tren especial con jóvenes deseosos de conocer este deporte nuevo, con la presencia del presidente Domingo F. Sarmiento.
A la semana siguiente, los remeros participantes se reunieron en el café de Florida y Corrientes, y resolvieron fundar el Buenos Aires Rowing, decano de los clubes de remo. A éste le siguieron el club La Marina en 1876, el Tigre Boat Club en 1888, y al año siguiente el Teutonia, ahora mudado a Villa La Ñata.
En 1901 la colectividad británica creó la Unión Remeros Aficionados al Río de la Plata, denominación que cambió en 1927 por la de Asociación Argentina de Remeros Aficionados. En 1924, un ocho (8 remeros) se clasificó en los Juegos Olímpicos. El gran triunfo fue dado en 1951 en los Juegos Olímpicos de Helsinki, con Tranquilo Capozzo y Eduardo Guerrero.
Luego de grandes logros y actuaciones dispares en muchas competencias, la participación del equipo argentino en los Juegos Panamericanos de Guadalajara fue sorprendente: con 8 medallas, recuperó el liderazgo en el continente.


FUENTE: La Nación

Museo De Arte Tigre.

jueves, 20 de octubre de 2011








Entrada al Arroyo Las Gaviotas.

viernes, 14 de octubre de 2011

Playa sobre el río Sarmiento.


Planchada de amarra isleña.


Sauce eléctrico del Río Espera y Rama Negra Chica.

martes, 11 de octubre de 2011

Azalea criolla en el Delta.


Quinceañera en costanera del Río Tigre.


Centro de salud Río Capitán.

sábado, 8 de octubre de 2011